Entrevista con Aleksandar Petrov

Marcela Grassi, arquitecta de formación, es una fotógrafa ya conocida por nuestros lectores. Sin darnos cuenta, llevamos publicando fotografías tomadas por ella desde sus inicios, hace más de siete años.De Marcela Grassi,Me gustaría empezar hablando de la sinceridad de su trabajo. Cuando elegimos como imagen de portada de Oscar Niemeyer de MAC Niteroi, uno de esos arquitectos-personajes que siempre evocan narraciones épicas de la arquitectura, llamamos a Marcela para decirle que la imagen no era perfecta y tenía algo de ruido, Marcela comentó: Sí, así es, porque hice un escaneo para digitalizarla y en el proceso había habido alguna pérdida. Nos dijo que la imagen era importante porque fue una de las primeras, antes incluso de pasar a la fotografía digital. Como ocurrió con la obra de Banksy hace unos días, pensamos que esta imagen aumentaba su valor y era aún más interesante, para hablar de Grassi.
La trayectoria Marcela Grassi en la fotografía es larga. Desde sus inquietudes iniciales impresas por la pasión de su abuelo, pasando por las tomas analógicas, hasta hace once años, cuando se pasó a la fotografía digital. Una trayectoria en la que la fotografía, como ella misma nos cuenta, se convierte en algo natural a la hora de mirar arquitectura.
No sé si es intencionado o no que en muchas de sus fotografías se reconozca una luz especial, dorada, como en algunas imágenes de la intervention of the Oliva Artés factory by BAAS Arquitectura, en otras de la Vallvidrera house,o en algunos de los Bündner Kunstmuseum. sus imágenes, de impecable ejecución, nos muestran una narrativa sobre los edificios que cuenta las intenciones del arquitecto, añadiendo además imágenes con su visión más personal, lo que permite enriquecer notablemente la narración visual del proyecto.
Marcela Grassi se está convirtiendo poco a poco en un clásico, seguramente pronto como una de sus queridas referencias, Jordi Bernadó o el fallecido Gabriele Basilico. Tiempo al tiempo.
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